Había un
hombre que vivía de vender globos en la feria. Tenía globos de todos los
colores, incluyendo amarillo, rojo, azul y verde. Siempre que el negocio iba
lento, soltaba al aire un globo lleno de helio y cuando los niños lo veían
subir, todos querían comprar uno. Ellos venían, compraban un globo y las ventas
subían otra vez. El realizaba este proceso todo el día. Un día sintió que
alguien le tiraba de su chamarra para llamar su atención. Volteó y vió a un
niño pequeño quien le preguntó: “¿Si sueltas un globo negro, también volará?”. Conmovido
por la preocupación del niño, el hombre respondió con empatía: “Hijo, no es el
color del globo, es lo que está adentro de él lo que lo hace subir”.
Lo mismo aplica a nuestras vidas. Es lo que está
adentro lo que cuenta. Lo que está dentro de nosotros que nos hace subir es
nuestra actitud.
¿Alguna vez te has preguntado porque algunos
individuos, organizaciones o países son más exitosos que otros? No es un secreto. Estas personas piensan y actúan más
efectivamente. El éxito de un individuo, organización o país, depende de la
calidad de su gente.
Ningún programa de capacitación técnica funciona a menos que tengas los
cimientos correctos, y éstos son el carácter, integridad, buenos valores y una
actitud positiva. No es que no se requiera la capacitación técnica, es que ésta sólo funcionarán cuando tengas los cimientos correctos, y
los cimientos correctos.
La torre Calgary se alza a 190.8 mts. El peso total de la torre es de 10,884 toneladas de las cuales 6,349 toneladas están bajo tierra (aproximadamente el 60%). Esto demuestra que algunos de los más grandes edificios tienen los más grandes cimientos. Al igual que los edificios que se elevan bajo fuertes cimientos, así se construye el éxito. Y el cimiento del éxito es la actitud.
Vamos a poner un ejemplo que nos muestre claramente cuando hay un cimiento correcto: algunos programas de servicio enseñan a los participantes a decir “por favor” y “gracias”, a dar sonrisas y saludos de mano. ¿Pero cuánto durará una persona dando una sonrisa falsa si no tiene el deseo de servir? Además las otras personas se darán cuenta de ello, y si la sonrisa no es sincera, es irritante.
De todos modos es necesario decir “gracias”, “por favor”, dar sonrisas, etc., pero es mucho más fácil de hacer cuando vienen acompañados del deseo de servir.
Mi punto es que tiene que haber algo interno que nos lleve a las formas, y no tener forma sin algo interno que lo sustente, porque tarde o temprano dejará de hacerse o no tendrá un impacto real.
Así que además de aprender las formas debemos alimentar nuestro interior mejorando nuestro carácter, siendo íntegros, y sumando a nuestro comportamiento buenos valores y una actitud positiva.
Así que además de aprender las formas debemos alimentar nuestro interior mejorando nuestro carácter, siendo íntegros, y sumando a nuestro comportamiento buenos valores y una actitud positiva.
Alguien
alguna vez se le acercó a Blaise Pascal, el famoso filósofo francés y le dijo: “Si
tu viera tu mente, sería mejor persona”. Pascal le respondió: “Sé mejor persona
y tendrás mi mente”.
Fuente: Tú puedes ganar, Shiv Khera